Desde que recuerdo, en casa siempre hemos guardado telas, recortes, restos de labores y todo aquello relacionado con la costura, unas veces porque puedes necesitar algo en un momento dado para otra labor o bien, como recuerdo de labores antiguas que no tienen ningún uso.
En este caso mi madre guardaba un muestrario con diversas pruebas de bordados de sus comienzos en el aprendizaje del arte de bordar, así como varios bastidores para el bordado a mano. Y decidí que ya era hora de utilizarlos en algún proyecto decorativo.
La tela era de color blanco y decidí darle un aire más vintage, para ello lo que hice fue preparar una infusión de té rojo e introducir la tela en ella, dejamos reposar un tiempo dependiendo del mayor o menor grado de color que nos guste, aclaramos y dejamos secar.
La verdad es que en la fotografía no se aprecia mucho, pero quedó con un bonito tono beige. Uno de los elementos que están muy en auge en decoración son los bastidores de madera, por eso pensé inmediatamente utilizarlos con los bordados para decorar una pared.
Una vez colocadas las telas, y en una primera prueba decorativa, el resultado no me convencía, pues aunque los bordados me gustaban mucho, el resultado en la pared no decía nada.
Eran estéticamente demasiado planos, le faltaba color y me decidí a dárselo. ¿Cómo? Pues pintando, en este caso, utilizando pintura textil. Los colores utilizados, ocres, amarillos y verdes en la gama de tonos que coordinaban con el resto de la decoración. Queríamos una nota de color pero integrada con el resto.
El lugar donde quería colocarlos era encima de un aparador que restauré, podéis verlo aquí y que ahora utilizo como mueble auxiliar en mi dormitorio. Anteriormente ya había colgado un cuadro con un dechado muy antiguo que pertenecía a mi familia, por esa razón, pensé que el tamaño de los bastidores y las telas bordadas serían dos elementos decorativos perfectos para acompañar al cuadro.
Al ser un rincón de mi dormitorio, los tonos son muy suaves pues es una estancia en la que me gusta sentirme relajada.
Espero que este pequeño rincón os inspire y os anime a decorar con esas pequeñas labores que seguro que aún conserváis por casa.
Muchas gracias por tu visita
Que lindo que quedo pintado!!!!! Muy buena idea!! Hermoso el rincon que te quedo!!
ResponderEliminarBesosss
Quedaron muy delicado con esos tonos, me gustan mucho! Gracias por compartir!
ResponderEliminarTodo un acierto el darles esos detalles en color, ese contraste realzan mucho el bordado.
ResponderEliminarSaludos!!
Que idea más bonita y que delicado te ha quedado, todo un acierto, me ha encantado.
ResponderEliminarUn saludo
Una bonita manera de exponer esos trabajos que ya no se hacen. Buen fin de semana
ResponderEliminar¡Qué preciosa manera de conservar esos bordados! Es cierto que los bastidores están de moda, pero si lo que llevan traen buenos recuerdos, su valor es doble!
ResponderEliminarUn beso!! Helena
Muy original la idea de pintar el bordado ,nunca se me hubiera ocurrido ! y quedaron hermosos ! ademas es una perfecta idea para atesorar recuerdo de una forma muy decorativa! Besos y buen finde.
ResponderEliminar¡Qué bonito, Nieves! Nos encanta sacar a la luz labores antiguas y exponerlas en lugares privilegiados de nuestra casa, pero tú le has dado una vuelta de tuerca. Pintar esos bordados ha sido una idea preciosa y de lo más original.¡Nos encanta! Ahh, y el aparador ha quedado perfectamente restaurado y luce perfecto bajo tus bastidores.
ResponderEliminarBesos a montones de las dos y feliz fin de semana.
J&Y
Qué buena idea Nieves, recuperar esos preciosos bordados de una forma tan original y volver a darles el protagonismo que se merecen.
ResponderEliminarEl rincón ha quedado precioso con todos esos elementos, y lo has conseguido combinando piezas únicas y con valor sentimental, me encanta.
Precioso trabajo, Nieves. Un beso fuerte.
Qué bonito ha quedado Nieves! Me encanta ese precioso aire nostálgico que despierta en nosotros este tipo de elementos :) Una pasada como quedan!
ResponderEliminar¡Estupendísima idea!
¡Un besazo!
¡Qué idea tan estupenda, Nieves!
ResponderEliminarEstas labores tan primorosas merecen ser lúcidas y disfrutadas y tú has encontrado la solución perfecta para ello. Sobre el magnifico aparador quedan ideales.
Besitos y feliz fin de semana.
Qué trabajo tan delicado Nieves. El resultado es genial. Me enamoré además del aparador!! Un besote!
ResponderEliminarGuauuu me encanta!!! yo también tengo pañitos bordados a maquina, me gusta mucho tu idea, si no te molesta quizá también lo haga, un besito que tengas un buen finde.
ResponderEliminarAcertaste al darle un toque de color a los bordados, quedaron muy pero muy bien, conjuntados con el dechado. Y el mueble que restauraste, un lujo! Me quedo curioseando tu blog, y de dejo un gran saludo.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho la composición que has hecho con esas labores y me quedo con las ideas de teñir con te rojo y darles un toque de color con pintura textil ;-)
ResponderEliminarSaludos y feliz semana
Magnifica idea y has conseguido un espacio como bien dices relajante y que seguro que te treae bonito recuerdos. No ha tenido que ser muy fácil tener el pulso neceario para pintar los bordados sin manchar nada la tela, pero para ti es sencillo.
ResponderEliminarBesos
Qué afortunada de poseer ese tesoro de bastidores y bordados, me han chiflado, y más aún la original forma de lucirlos!. El toque de la pintura es todo un acierto, los hace resaltar de una manera muy suave y delicada. Me ha encantado todo, y el aparador, menudo bellezón!.
ResponderEliminarFeliz semana, un besazo!.
Nieves!!, son preciosos. felicidades, eres toda una artista!!
ResponderEliminarQue buena idea para recuperar y atesorar esos bordados que ya no existen mas!! Me encanto tu idea, me pareció super original y fácil de hacer, me alegro que te hayas sumado a las frugales!
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